Eros Recio, primer doctor honoris causa con síndrome de Down: Un hito histórico hacia la inclusión y la «Superidad»

La Universidad Anglohispanomexicana de Puebla otorga a Eros Recio, un valenciano con síndrome de Down, el título de doctor honoris causa, destacando su labor en la promoción de la inclusión y la defensa del concepto de «Superidad». En un hecho sin precedentes, Eros Recio, un valenciano con síndrome de Down, ha sido investido como doctor honoris causa por la Universidad Anglohispanomexicana de Puebla, en México. Este reconocimiento marca un hito en la historia de la educación y la inclusión, al ser la primera vez que una persona con síndrome de Down recibe este honor académico. El acto, cargado de simbolismo y emoción, resalta la importancia de la inclusión social y la capacidad de superación de las personas con discapacidad, a quienes Eros prefiere llamar «superes».

La Ceremonia: Un Tributo a la Inclusión y la Diversidad

La ceremonia de investidura se llevó a cabo en el majestuoso salón principal de la Universidad Anglohispanomexicana de Puebla, presidida por el rector, el doctor Raúl Ramírez Cruz. El evento contó con la participación de figuras destacadas del ámbito académico, como la doctora Kathyna Arroyo Mijailidis del claustro de Bellas Artes, y el doctor Amado Sánchez del claustro de Ciencias Jurídicas, quienes fueron los principales impulsores de este reconocimiento. El acto comenzó con la interpretación del Canon en Re mayor de Johann Pachelbel, un preludio solemne que marcó el tono del evento. Bajo el lema oficial de la institución, Ego sum qui sum («Yo soy el que soy»), Eros Recio fue recibido con todos los honores reservados para los grandes académicos. El bienquisto postulante fue recibido por la doctora Arroyo, seguida de la entonación de los himnos nacionales que reflejaron la solemnidad y la importancia del momento.

Un Reconocimiento Histórico

Eros Recio, conocido por su labor en defensa de los derechos de las personas con diversidad funcional, recibió la estola universitaria, los guantes blancos —símbolos de su inmaculada trayectoria— y el birrete doctoral, en una ceremonia que destacó tanto por su carga emocional como por su significado histórico. El rector Raúl Ramírez Cruz loó las virtudes del nuevo doctor honoris causa, subrayando su incansable trabajo por la inclusión y su capacidad de inspirar a otros. En su discurso, Eros Recio expresó su agradecimiento y aprovechó la ocasión para presentar su innovador concepto de «Superidad».

El Concepto de «Superidad»: Un Cambio de Paradigma

Durante su intervención, Eros Recio habló con pasión sobre su propuesta de sustituir el término «discapacidad» por «superidad». Según explicó, la «Superidad» reconoce a aquellas personas que, a pesar de enfrentar desafíos físicos, psíquicos o sensoriales, son capaces de superarse a sí mismas y de alcanzar sus metas con determinación y esfuerzo. Este enfoque positivo busca redefinir la percepción social de las personas con discapacidad, viéndolas no solo como individuos que enfrentan dificultades, sino como ejemplos de resiliencia y superación. Eros también hizo un emotivo reconocimiento a su amiga María del Mar Galceran, la primera diputada del mundo con síndrome de Down, recordando que ambos han abierto caminos en sus respectivos campos, demostrando que las barreras pueden ser superadas con determinación.

Un Llamado a la Inclusión y la Diversidad

El discurso de Eros concluyó con un llamado a la sociedad para que termine con todas las formas de discriminación y adopte con orgullo la bandera de la «Superidad». Esta bandera, con sus tres colores —oro, plata y bronce—, simboliza la diversidad y el valor de cada individuo, independientemente de las dificultades que enfrenten. Eros invitó a todos a unirse a este movimiento, que no solo busca la inclusión de las personas con diversidad funcional, sino también su reconocimiento como personas capaces de aportar valor y enriquecer la sociedad.

Un Ejemplo para el Mundo

La investidura de Eros Recio como doctor honoris causa es un ejemplo poderoso de cómo la educación y las instituciones académicas pueden desempeñar un papel crucial en la promoción de la inclusión. Este evento no solo celebra los logros de Eros, sino que también envía un mensaje claro al mundo: todos, independientemente de sus capacidades, merecen la oportunidad de ser reconocidos por sus esfuerzos y contribuciones. Este reconocimiento histórico marca un antes y un después en la lucha por los derechos de las personas con discapacidad, y reafirma la idea de que la inclusión no es solo un objetivo, sino una realidad que se puede alcanzar con el compromiso de toda la sociedad. ¿Crees que el concepto de «Superidad» puede ayudar a cambiar la percepción social de las personas con discapacidad? ¿Cómo podríamos apoyar más iniciativas que promuevan la inclusión y el reconocimiento de la diversidad funcional?